Tal cual. Los hemos hecho desaparecer. Cualquiera de nuestros alumnos y alumnas que visitan a diario las instalaciones de Ergoactiv ya no encontrarán vasos de plástico para cumplir con la necesaria hidratación antes o después de practicar sus movimientos.
A finales de 2017, y por iniciativa de una de nuestras profesionales, hicimos algo tan sencillo como consultar cuántos vasos de plástico consumíamos al año. La cifra nos dejó perplejos. Uno a uno no le das importancia, pero cuando sabes que son 12.000 y te conciencias de que el impacto medioambiental es enorme… da que pensar. Puestos uno tras otro en línea recta son 84 kilómetros de vasos.
Es lo que hicimos y no tardamos en buscar alternativa. Cambiamos los 12.000 vasos de plástico por cantimploras reutilizables que regalamos a nuestros alumnos y alumnas. Apenas llevamos medio año desde la implantación de esta medida y su acogida ha sido espectacular.
Solo tenemos un planeta y lo tenemos que cuidar entre todos. Seguramente nuestra decisión solo representa un grano de arroz, pero como reza el dicho: grano a grano se hace granero.
Para Ergoactiv esta decisión supone un paso más en nuestro compromiso con un desarrollo social y económico sostenible. A este paso le seguirán otros.
Me parece una muy buena iniciativa ya que los vasos de plástico personalizados contaminan mucho y tienen un impacto muy negativo en el medioambiente. ¡Felicidades por esta decisión!